La construcción del Estado regulador y la relación Estado Sociedad Civil
El artículo hace un análisis de las críticas al Estado y sus roles tradicionales y la preeminencia del Estado subsidiario. Su conclusión de todo ello, es que si bien existen diferencias, éstas, hoy día, son más bien de énfasis y nos llevan a plantear una cuestión básica, trascendental: Estado y Merc...
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Format: | Article |
Language: | Spanish |
Published: |
Universidad de Chile: Instituto de Asuntos Públicos (INAP)
2002
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Online Access: | http://dialnet.unirioja.es/servlet/oaiart?codigo=2255103 |
Source: | Estado, gobierno, gestión pública: Revista Chilena de Administración Pública, ISSN 0717-6759, Nº. 1, 2002 |
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El artículo hace un análisis de las críticas al Estado y sus roles tradicionales
y la preeminencia del Estado subsidiario. Su conclusión de todo ello, es
que si bien existen diferencias, éstas, hoy día, son más bien de énfasis y nos
llevan a plantear una cuestión básica, trascendental: Estado y Mercado no
tienen por qué ser entes antagónicos y en permanente conflicto desbordado.
Si no más bien deben convertirse en elementos complementarios de una misma
realidad, con capacidad para construir una relación adecuada, equilibrada,
sinergética.
La relación entre Estado y Mercado no puede ser otra que la de un Estado
regulador que represente la ética social. Sin embargo, ¿el Estado tiene capacidad
para regular? La respuesta en nuestra realidad es que estas facultades
existen en la letra, pero son difíciles de operacionalizar por el racionamiento
de recursos que se le otorgan al Estado. En estas circunstancias
hay que considerar al otro ente social: la sociedad civil, que en muchos
países juega un rol esencial en esta regulación. Araya termina afirmando
que: «La conclusión es que aún falta mucha sociedad civil por construir, y
que si bien el mercado ha recuperado su rol y la actividad económica privada
es resguardada, por un consenso nacional, este consenso debe dirigirse,
ahora al desarrollo de toda la multiplicidad de formas que la sociedad civil
puede adquirir. Una sociedad civil desarrollada, siendo circunstancial a un
Estado fuerte, en una sociedad moderna, es condición básica para afirmar
que nos adentramos al Siglo XXI como parte de los países exclusivos, mas
no excluyentes». |
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